El sacerdote Juan Pozuelo Jiménez pregona la Fiesta de Cruces y Mayos con recuerdos de su infancia en Infantes y con deseos de esperanza para el futuro

En un acto celebrado en el Auditorio Municipal de ‘La Encarnación’, y conducido por Paula Segundo Chaparro, ayer 1 de mayo, Villanueva de los Infantes celebraba su tradicional Pregón de las Cruces. La velada comenzaba con la melodía del mayo interpretada al violín por Elena Ortega.

 

En un guiño a las tradiciones, tres niños de la localidad llegaron al Auditorio cargando con el típico chaparrico, una forma simbólica de recordar cuando se recogía leña por las calles para encender los turros.

 

A continuación, la Concejala de Festejos, Ana Belén Rodríguez Gallego, hacía entrega de un reconocimiento al autor del cartel anunciador de las Cruces 2022, Carlos Javier Rubio, quien definía la fiesta de las Cruces como poliédrica y desvelaba cómo de una fotografía de Julio Pinel hecha en 1960, había surgido la idea del cartel anunciador de este año, a sugerencia del Concejal de Patrimonio, Pedro Manuel González. Seguidamente, la Alcaldesa, Carmen María Montalbán, había entrega de una placa de reconocimiento a Rosario Pacheco Maestro, la componente femenina más veterana en formar parte de una rondalla de mayos.

 

La Concejala de Festejos, Ana Belén Rodríguez, hablaba de las Cruces como de “una tradición popular y religiosa que aúna arte, fe y celebración un municipio que lleva a sus gentes a mostrar lo mejor de los tienen, compartiendo mucho más que un puñao y un ponche”. Fue la encargada de presentar al pregonero, el sacerdote Juan Pozuelo Jiménez, quien en su alocución se definía “como cura de pueblo y mostraba la satisfacción de volver a encontrarse con su pueblo, al tiempo que hablaba de los recuerdos que nos van configurando como persona”.

 

Un pregón con el que deleitó al público asistente con “recuerdos de la Cruz vinculados con su abuela, en torno a la Cruz del Puente Malenas, y donde los olores son como fotos que nos actualizan momentos del pasado”. Habló de una fiesta en la que se celebra el hecho de estar juntos y terminó pidiendo tres deseos: Salud del corazón, energía para nuestras manos e ilusión por nuestro pueblo.

 

La última en intervenir fue la Alcaldesa, Carmen María Montalbán, quien destacaba de Juan Pozuelo “su cercanía, su cariño y su humildad, lo que lo convierten en un pregonero excepcional”. Además, subrayaba “el esfuerzo que supone para las familias, cofradías, asociaciones y vecinos, mantener viva esta tradición y seña de identidad, uno de los reclamos turísticos más significativos, a pesar de los difíciles momentos económicos que estamos atravesando”.  

 

El Pregón de las Cruces terminaba como es habitual con la Asociación Cruz de Santiago cantando el mayo a los protagonistas e interpretando algunas piezas de su repertorio por la rondalla y el cuerpo de baile.